
La importancia del control integrado en Guatemala
Las plagas y enfermedades representan una de las mayores amenazas para los productores de manzana, pera, durazno y ciruela en el altiplano guatemalteco. El manejo integrado de plagas (MIP) combina prácticas preventivas, biológicas y químicas que permiten reducir costos y proteger el medio ambiente.
Principales plagas y enfermedades en frutales deciduos
- Polilla de la manzana (Cydia pomonella): causa daños directos al fruto.
- Pulgones: debilitan brotes jóvenes y transmiten virus.
- Trips: provocan manchas y deformaciones en la fruta.
- Moteado y oídio: enfermedades fúngicas que reducen calidad comercial.
Estrategias prácticas de manejo integrado
- Prácticas culturales
- Eliminación de frutos caídos y restos de poda para reducir focos de infección.
- Poda adecuada para mejorar ventilación y disminuir humedad.
- Control biológico
- Uso de insectos benéficos como crisopas y mariquitas para controlar pulgones.
- Trampas de feromonas para disminuir población de polilla.
- Monitoreo constante
- Revisar semanalmente el estado del cultivo.
- Tomar decisiones según umbrales de daño económico.
- Uso responsable de agroquímicos
- Rotación de ingredientes activos para evitar resistencia.
- Aplicaciones dirigidas solo cuando el monitoreo lo justifique.
Caso de éxito
En Totonicapán, asociaciones de productores han logrado reducir un 40% el uso de agroquímicos aplicando trampas de feromonas y control biológico, mejorando la calidad de la fruta y reduciendo costos.